Enfoque individual

Mujer de 28 años con historia previa de disfagia intermitente a sólidos de carácter leve de más de 10 años de evolución que acude por aumento de frecuencia de la disfagia hasta hacerse casi diaria, con temor a comer y pérdida de peso secundaria, y episodios de impactación alimentaria en el último mes, sin odinofagia, asociando clínica de pirosis y regurgitación. Se inicia tratamiento con omeprazol 20 mg/24h y se realiza solicitud de asistencia preferente a medicina digestiva.

Antecedentes personales: No RAM. No tóxicos. Intolerancia a lactosa.
IQ: Apendicectomía.
No tratamiento habitual.

Exploración física básica: sin hallazgos patológicos.

Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas

Esofagitis eosinofílica.
Diagnóstico diferencial: ERGE, Acalasia, Otros trastornos de la motilidad.
Se necesitan mayores estudios para estandarización de tratamiento y mejor conocimiento de pronóstico.

Tratamiento y planes de actuación

- Dieta de elimiación de alimentos alergénicos de forma individualizada.
- Inhibidor de la bomba de protones.
- Glucocorticoides tópicos (fluticasona, budesonida).

Evolución

Desde medicina digestiva se aumenta omeprazol a dosis doble y se solicita gastroscopia preferente; con diagnósitco de esofagitis eosinofílica. Se realiza interconsulta a alergología, y se inicia tratamiento con dieta de eliminación de alimentos alergénicos más comunes y fluticasona ingerida; sin clara mejoría clínica.
Se vuelve a realizar gastroscopia: normal. Se ensaya con budesonida ingerida sin cambios clínicos.
Por parte de alergología se descarta sensibilidad a los alérgenos alimentarios más comunes.
A pesar de la normalización a nivel histológico tras el tratamiento descrito la paciente persiste sintomática; se ampliará estudio con manometría esofágica por parte de medicina digestiva.

La esofagitis eosinofílica es una enfermedad inflamatoria inmunoalérgica crónica del esófago, caracterizada clínicamente por síntomas relacionados con disfunción esofágica e histológicamente por inflamación predominante con eosinófilos.
La incidencia de esta patología está en aumento, la etiología es desconocida y no existe un tratamiento estandarizado.
Cabe destacar la importancia del estudio continuado del médico para estar al día de las nuevas entidades nosológicas. Así como conocer los criterios de derivación a atención secundaria u hospitalaria.