Atención Primaria, ámbito rural.

Entras en el consultorio de doña Ana y algo especial te envuelve, al menos así lo describían los pacientes de ese pueblito en mitad del campo. Paciente de 56 años que acude a consulta por dolor abdominal de dos días de evolución. 

Enfoque individual

Paciente de 56 años que acude a consulta por dolor abdominal de dos días de evolución, sin fiebre, sin náuseas ni diarrea. Sin antecedentes médicos de interés. Se interroga al paciente sobre transgresiones dietéticas, consumo de agua no potable y alguna que otra preguntilla en relación a las fiestas del pueblo que han sido esa semana. Se explora al paciente, que presenta una exploración abdominal normal. Al explorarle se quita su boina, que le protege del sol en el campo, y se objetiva una lesión pigmentada a nivel frontal, que según nos cuenta le ha salido hace un tiempo.

Enfoque familiar y comunitario

Como nuestro paciente bien dice, él no es mucho de médicos, bastante tiene con su campo, sus animales y su huerto, no hay tiempo para otras cosas, como decía su padre.

Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas

Gracias a nuestro dermatoscopio visualizamos la lesión, que presenta pigmento azu-negro irregular. A través de la imagen podríamos realizar un diagnóstico diferencial entre carcinoma basocelular vs melanoma frontal izquierdo. 

Tratamiento y planes de actuación

Se deriva al paciente al servicio de Dermatología del hospital de referencia para valoración del caso. Allí se realiza biopsia incisional para analizarlo por parte de anatomía patológica. Los resultados de AP dan como diagnóstico un carcinoma basocelular superficial con presencia de abundante incontinencia de melanina en dermis.

Evolución

La cicatríz evoluciona bien. 

Aquí radica la importancia de cuidar al paciente, de no quedarnos con lo que nos cuenta, con ir más allá, con tener siempre los ojos bien abiertos. Con promover una educación sanitaria en el ámbito rural, autocuidado en pacientes que frecuentan trabajos en el campo, la protección solar, autoinspeccción de lesiones en la piel y promover una relación cercana médico-paciente. La atención primaria es la primera puerta de entrada del paciente y su patología, nos toca curar a veces, aliviar cada vez que podamos y consolar siempre.