El objetivo de incorporar Mindfulness en el programa de deshabituación tabáquica que realizamos en Atención Primaria es aportar una nueva herramienta que permita al paciente reducir los niveles de estrés reactivo a la dependencia psicológica. Perseguimos dotarlo de recursos que le permitan entrenar la respuesta de relajación y tomar conciencia de las dificultades para ser capaces de enfrentarlas.

Tras presentar en las XXI Jornadas de Residentes y III de Tutores de la SemFYC nuestro programa de abordaje del tabaquismo en la consulta de Atención Primaria y asistir a un taller de Mindfulness, decidimos incorporar esta práctica como instrumento de toma de conciencia de los síntomas de distrés emocional que experimenta el paciente que se enfrenta al reto de dejar de fumar. Fue entonces cuando contactamos con un psicólogo especializado para realizar una charla de iniciación dirigida a 10 pacientes que se encontraban en la fase de acción o mantenimiento. Con esto pretendemos que, en la relación entre la amenaza externa de la dependencia psicológica del tabaco y su evaluación cognitiva, los pacientes dispongan de recursos y estrategias propias que les permitan afrontar situaciones de riesgo y evitar así las recaídas.

La práctica de Mindfulness facilita la labor terapéutica y posibilita las modificaciones necesarias para mejorar el estilo de vida de nuestros pacientes, entre ellas dejar de fumar. Los pacientes entrenados bajo este programa perciben un mayor control de la situación de abstinencia psicológica gracias a un entendimiento más profundo de los síntomas emocionales, físicos y comportamentales que caracterizan el estado de dejar de fumar. 

Entendemos las dificultades de contar con la ayuda de un psicólogo especializado en Mindfulness en los centros de salud, si bien este tipo de intervención terapéutica es una herramienta que ha demostrado ser útil en deshabituación tabáquica.