Atención Primaria, posterior cirugía.

Caso multidisciplinar

Dolor abdominal

Enfoque individual

- AP: HTA en tratamiento. Mastopatía fibroquística. No hábitos tóxicos.

- Anamnesis: Mujer de 65 años con dolor abdominal epigástrico e hipocondrio derecho irradiado a espalda de varios meses de evolución, en ocasiones acompañado de náuseas. No síndrome constitucional ni reflujo. El dolor no se relaciona con las comidas. La paciente persiste con sintomatología tras tratamiento analgésico habitual.

- EF: Obesidad. Abdomen: blando y depresible con dolor a la palpación profunda en hipocondrio derecho, no hepatomegalia.

- PC: Analítica con valores normales. Ecografía abdominal con LOEs hepáticas en segmento VII y VIII sugestivas de hidatidosis. TC abdominal confirma el diagnóstico. En cultivo de heces se aprecia protoescolices (arena hidatídica) compatible con Echinococcus granulosus.

Enfoque familiar

Independiente para las ABVD, ama de casa, tiene dos hijos independizados. Vive con su marido.

Desarrollo

JC: Quistes hidatídicos. Diagnóstico diferencial: cólico biliar

Tratamiento

Se realiza Quistoperiquistectomia del segmento VII-VIII de hígado, durante la intervención la paciente presenta un shock anafiláctico, recuperándose posteriormente de forma correcta. Albendazol v.o.

Evolución

Favorable.

La hidatidosis, equinocosis o quiste hidatídico es una enfermedad parasitaria grave, provocada por larvas de Echinococcus granulosus, a menudo debido a la ingesta de alimentos contaminados con excremento de perro. Puede afectar a animales, tanto salvajes como domésticos, e incluso al ser humano.

Su incidencia es muy baja y suelen cursar durante años asintomáticos, en muchas ocasiones son detectados por exploraciones rutinarias.

La hidátide o quiste presenta un patrón de crecimiento lento, con años de evolución. Cuando se localiza en el hígado y obstruye las vías biliares provoca alteración de la enzimas hepáticas y aumento de la bilirrubina, siendo en ocasiones necesaria la resección de una parte importante del hígado.

Pueden adquirir grandes tamaños e invadir parte de un hemitórax, provocando tos irritativa, hemoptisis, incluso tos y molestias de las vías respiratorias superiores.