Ofrecer un programa educativo, motivador, accesible todo el año, en el centro de salud, que sirva a las personas para gestionar su propio peso corporal y consolidar hábitos saludables en alimentación y actividad física.

Desde 2017, se desarrollaron sesiones grupales (cada 3 semanas, 14 módulos/año), previamente publicitadas en carteles y Facebook. Durante 90 minutos, 2-3 profesionales (médicos, enfermeros/as y residentes) compartieron conocimientos, mostraron estrategias efectivas y motivaron a los participantes a alimentarse saludablemente (calidad + cantidad), consolidar un estilo de vida activo y controlar los aspectos psicológicos negativos. Los pacientes interaccionaron libremente entre sí y con los educadores, para resolver dudas, mostrar avances/dificultades personales y ayudar a otros asistentes a resolverlas. Se persiguió prioritariamente el fomento del autocuidado, aportando herramientas para la autogestión del propio peso, con nuestro apoyo profesional. Se expusieron presentaciones audiovisuales (formativas, motivadoras) y se entregó material impreso de cada módulo expuesto (“Dieta mediterránea”, “El mejor ejercicio para perder peso”, “Mitos en alimentación”, etc.).

Además, se ofrecieron visitas individuales (voluntarias) a los participantes, para ayudarles a identificar sus “puntos débiles” (grandes raciones, ansiedad por la comida, picoteo, escasa actividad física, etc.) y proponer estrategias conductuales personalizadas.

Participaron +100 pacientes, que reportaron mejoras en peso corporal y cambios favorables en sus hábitos. El Programa -afirmaron- les supuso una gran ayuda para gestionar su propio peso y afianzar los fundamentos saludables para manejarlo: “Es un proceso sostenido y esforzado”, “No hay atajos ni dietas-milagro”, “Es imprescindible la actividad física”, “Controlar las emociones resulta fundamental”, etc.

No fueron necesarios recursos materiales extraordinarios ni conocimientos exhaustivos para iniciar las actividades, visiblemente prioritarias. Además, la satisfacción derivada de los resultados obtenidos y del contacto con personas motivadas y satisfechas, estimuló a los profesionales a mejorar su formación y habilidades y aumentar la eficiencia del tiempo con los pacientes.