Atención Primaria. Dermatología.

Hombre de 35 años que consulta por lesiones en las manos de 2 semanas de evolución.

Enfoque individual

Antecedentes personales: no patología personal ni familiar de interés. No tratamiento habitual.

Nos consulta por lesiones blanquecinas en las yemas de los dedos que aparecen a los pocos minutos del contacto con el agua y que se exacerban con la sudoración. Al poco tiempo de secarse las manos, las lesiones remiten. El paciente niega dolor, picor ni otros síntomas asociados. La exploración física inicial es anodina. Tras sumergir las manos en agua, se observan pápulas blanquecinas de aspecto macerado en las yemas de los dedos y en las eminencias hipotenares.

Enfoque familiar y comunitario

Vive solo y trabaja en construcción.

Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas

Se plantea diagnóstico diferencial con otras enfermedades dermatológicas:

- Acroqueratodermia papulotranslúcida hereditaria: principal diagnóstico diferencial por la similitud morfológica. No obstante, se descarta este diagnóstico al considerar la asociación con traumatismo, el patrón de herencia autosómica dominante y el curso permanente de esta entidad.

- Urticaria acuagénica: si bien es desencadenada por la inmersión o contacto con el agua, no suele afectar las palmas de manos y las lesiones son diferentes (habones).

- Eczema dishidrótico: aunque también se relaciona con la humedad, suele presentar picor, dolor y otras lesiones cutáneas (vesículas, fisuras o ampollas).

Finalmente, se orienta como queratodermia acuagénica. Dado que se ha descrito en la literatura su asociación con la fibrosis quística, se deriva a Dermatología para completar el estudio.

Tratamiento y planes de actuación

Desde Dermatología, se descarta fibrosis quística tras realizar el estudio genético y le pauta toallitas de cloruro de aluminio hexahidratado.

Evolución

Tras 3 meses del tratamiento, el paciente refiere mejoría.

La queratodermia acuagénica es una rara variante de queratodermia adquirida y transitoria que se caracteriza por la aparición de las pápulas blanquecinas en las palmas o las plantas tras el contacto con agua. El diagnóstico es principalmente clínico y se han descrito casos relacionados con fibrosis quística. Por lo tanto, como médico de Atención Primaria, deberíamos realizar una buena anamnesis y una exploración física adecuada para su orientación diagnóstica y conocer su asociación con fibrosis quística.